Etiqueta: Belleza

Antes Dudaba, ahora no se – 5.7.15 – Henry J. White

Antes Dudaba, ahora no se – 5.7.15 – Henry J. White

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Tu querías una poesía,
cincelada con amor y caricia,
yo te propuse un sueño
en el lago del retiro, en su orilla.

Yo quería esa piruleta,
dulce y rebelde, como tu alma,
mas misteriosa que inquieta.

Una sonrisa es lo que obtuve
que hizo cambiar mi meta.
Ya no quiero piruleta, -dije-
mientras en un puño, tu corazón sostuve.

Volverme loco juntando
minutos y segundos.
mandar a paseo al sueño
quedarme contigo hablando.

Desvencijar del reloj sus manillas,
para no darme cuenta
que la noche se convirtió en día,
y tu misterio se hizo en mi, semilla.

Temer al destino fiero.
y a mi instinto guerrero,
saber de antemano,
que me harás mas daño, del que quiero.

Siempre he querido, ver el puzzle,
sin tener todas las piezas.
Y con ello solo ocurre,
que conviertes la nobleza en tristeza.

Y querer seguir caminando,
a pesar de la certeza
de que tu locura y belleza
me seguirán descolocando.

No habrá noche sin día,
ni versos sin rima,
ni espacio en tu cuerpo
que no besaría.

Con mis labios,
salidos de un tintero.
Y de tus sueños sabios
resurgiré puro y lisonjero


No Terminada.

Paciencia – 21.6.15 – Henry J. White

Paciencia – 21.6.15 – Henry J. White

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No quiero hacer una poesía
vana y sin sentido.
Sino aquella que me lleve
de mis versos a tu oído.

Que mis letras
se conviertan en suspiro,
y en tus sueños se libre
nuestro idilio.

Que fiscal sea testigo,
la serie una escena de un libro,
y que tu seas,
de mi, el destino.

Puedo escribir versos de dolor, miedo y tormento.
También de risas, de sueños y enamoramientos.
Pero eso, no es lo que ahora quiero.

Pues la belleza de tu misterio,
requiere de un tintero genio.
Y por ende mayor tiempo,
para escribirlo con gran ingenio.

No desesperes, dulce Cake,
pues toda gran obra,
necesita de un gran esfuerzo.

Y para ello yo requiero
de mis mejores versos
y tus mas profundos sueños.

Una sonrisa y dos mil besos.
Sellan este acuerdo.
Para que seas musa
de mi eterno tintero.

Deja que la noche sea oscura,
que mis palabras se entrelacen
para confeccionar tu mayor cura.

Amor eterno, heredero de tu cuello,
de tu labios en verano y en invierno

Deja que la noche siga oscura,
hasta que amanezca y entonces
solo, simplemente, todo ocurra.